¿Carros impulsados por energía eólica?, podría ser posible

He de reconocer que el título de la entrada podría inducir al error. Hoy en día, los coches impulsados eléctricamente, obtienen su electricidad desde un enchufe, que o bien podemos tener en nuestras casas, o bien en alguna que otra estación de recarga (hoy en día, cosa rara, la verdad). Sin embargo, este hecho hace que los coches eléctricos no sean totalmente sostenibles, ni emitan nada de CO2 a la atmósfera, puesto que la electricidad que usan para recargar sus baterías provienen de diversos lugares. Es por ello que empresas como Ford y Audi con su A3 TCNG E-Gas Concept (entre otras), se preocupen por la forma en la que se recargan sus modelos, ofreciendo paneles solares, o fuentes renovables para la obtención de la electricidad.

Sin embargo, habría otra opción que aún no se ha explotado mucho, y es la de

 ofrecer estaciones de recarga gracias al poder que nos brinda el viento. Y es que el motivo es que no en todos los sitios podría poder instalarse una de estas instalaciones, ya que no en todos los lugares tenemos viento, mientras que tener sol, es más fácil.

Sin embargo, una compañía de Nueva York, ha creado este curioso sistema que podéis ver en la foto, para recargar las baterías. El llamado sistema Sanya Skypump, combina una estación de recarga accionada por el viento de unos 4 kW, con una torre de unos 12 metros de altura con su correspondiente hélice que será la encargada de abastecer a la estación de recarga GE Wattstation.

La gracia del invento es que a diferencia de las turbinas tradicionales eólicas, este tipo de hélices necesitan muy poco espacio para poder moverse, por lo que el espacio es óptimo para las grandes ciudades, o estaciones de servicio. Eso sí, el viento deberá estar situado entre los 10 km/h y los 40 km/h, ya que la variación de este parámetro, haría difícil la recarga mediante este sistema.

Esta estación GE WattStation cuesta unos 25.000€,  y dicha unidad está en principio destinada a parkings de centros comerciales, ofreciendo un tiempo de recarga estimado en torno a las 6 u 8 horas, aunque dependerá de modelo, claro. Y como mide mas o menos lo mismo que las farolas de las carreteras, el impacto medioambiental sería mínimo.

De momento, el Sanya Skypump está siendo probado en Barcelona, Beijing y Nueva York, y irán recogiendo datos para su posterior mejora. Dichos datos, los veremos el próximo año, y estamos seguros que serán de gran interés, aunque todavía queda mucho hasta que este tipo de recargas sean productivas, pero está claro que nos alegramos de que las marcas se preocupen de ofrecer diversas alternativas ecológicas.

Fuente: Motorfull.com