El líder cubano Fidel Castro aparece en los documentos de filtraciones por Wikileaks y tratan sobre el momento en 2006 sufrió una grave hemorragia a bordo de un avión que iba desde Holguín a La Habana, pero se negó a ser operado pese estar a punto de morir.
A Castro se le diagnosticó diverticulitis de colon, que consiste en una inflamación en la pared intestinal, que le causó una gran hemorragia.
El ex mandatario presentaba una perforación en el intestino grueso y necesitaba una intervención que consiste en una abertura en la parte exterior del abdomen para eliminar los productos de desecho hasta que sane el colon o se le efectúe otra cirugía para sustituir el ano.
Según el informe, Castro "se opuso" a la intervención, "diciendo que debían cortar la parte infectada y empalmar el intestino al colon".
"Con el paso del tiempo, y al haberse infectado el colon, la operación falló y la parte empalmada se separó. Tuvieron que operarle de nuevo, pero se toparon con una fístula, cuya existencia desconocían", añade.
Según el informe médico, una fístula normalmente bloquea la digestión de la comida, con lo que Castro perdió cerca de 18 kilos y hubo de ser alimentado con suero.
El ex mandatario cubano fue tratado con "un aparato fabricado en Corea", aunque "sin mucho éxito".
En uno de los cables filtrados, el entonces jefe de la misión diplomática, Michael Parmly, destaca que "Castro atraviesa un estado terminal y sufrirá un inevitable deterioro de sus facultades mentales hasta el momento de su muerte. Pero no va a morir inmediatamente".
"Creemos que un regreso definitivo es improbable, pero Fidel Castro es ahora más una presencia entre bastidores, e incluso sobre el escenario, que lo que fue hace varios meses", añade.
En otro despacho, titulado "¿Qué pasará cuando él muera?", no prevén un escenario de convulsiones sociales, ni alteraciones en cuestiones de seguridad nacional.
Fuente: Gentetuya.com